La República Dominicana está en auge.

En los últimos años, la República Dominicana ha experimentado un desarrollo económico y turístico constante. Desde 2018, la economía del país ha crecido a una tasa media del 5%, impulsada por una combinación de turismo, inversión extranjera y exportaciones.

En términos de turismo, la República Dominicana es un destino popular en la región del Caribe, que atrae a más de 6 millones de turistas en 2019, más de 7 en 2022 y está clasificado como el segundo país más visitado del Caribe, después de México. La industria turística del país ha sido un motor clave del crecimiento económico, representando alrededor del 8% del PIB del país y el 13% del empleo total.

Gracias a ello, la República Dominicana se ha convertido en una de las economías de más rápido crecimiento del Caribe y América Latina.

El mercado inmobiliario también ha desempeñado un papel importante en el desarrollo económico del país. En los últimos años ha aumentado la demanda de propiedades residenciales y comerciales, sobre todo en destinos turísticos populares como Punta Cana, Santo Domingo y Samaná (Las Terrenas).

Uno de los principales motores de este crecimiento ha sido el clima político y económico estable del país, que ha atraído a inversores extranjeros en busca de oportunidades en el sector inmobiliario. Además, el Gobierno ha puesto en marcha varias medidas para promover la inversión extranjera, como incentivos fiscales, reglamentos simplificados y procedimientos simplificados de registro de la propiedad.

Como resultado, el mercado inmobiliario ha experimentado un crecimiento significativo, con un aumento medio de los precios del 4-6% anual. En particular, el mercado inmobiliario de lujo ha experimentado una demanda significativa, con propiedades de gama alta que atraen a compradores adinerados de todo el mundo.

Sin embargo, preocupa el impacto de la inversión extranjera en la economía local y la posibilidad de especulación inmobiliaria e inflación de precios. El Gobierno ha respondido a estas inquietudes introduciendo medidas de fomento de la vivienda asequible, como subvenciones para las familias con rentas bajas e incentivos para que los promotores construyan proyectos de viviendas asequibles.

En general, el mercado inmobiliario de la República Dominicana ha desempeñado un papel importante en el desarrollo económico y turístico del país, y se espera que siga creciendo en los próximos años. Sin embargo, es importante que el Gobierno y los inversores aborden los retos a los que se enfrenta el sector para garantizar un crecimiento y un desarrollo sostenibles.